Cómo tener una tienda online exitosa

Las tiendas virtuales se han convertido casi que en una necesidad puesto que tienen ventajas para el creador y sus clientes porque permite eliminar las barreras geograficas, se reducen costos cuando no hay tienda física, se puede decir que el “negocio” siempre está abierto, los costos de comunicación e inventarios también disminuyen pues internet es un canal que facilita eso. Si tu proyecto web es en e-commerce te vamos a dar algunas sugerencias para que sepas como poner precios en una tienda virtual y asegurar que tu sitio web y negocio sea todo un éxito.

Costos del producto

Empieza con evaluar los costos del producto o servicio, aunque parece obvio este paso debe fijarse en que sea rentable si incluye o no el envío, tenga presente el tema de las devoluciones, el servicio al cliente y si tiene un punto de venta físico, eso también suma al costo.

Costo de envío en tiendas virtuales

De todos los costos los de mayor peso son los de envío por lo que te sugerimos las posibles soluciones para este ítem:

las tarifas planas que son un mismo valor sin importar si es lejos o cerca la entrega, la ventaja es que es el procedimiento más rápido pero que representa la desventaja de que puede incrementar los precios de los productos a entregar cerca o con un precio menor a la tarifa plana de envío.
La otra opción es asignar precios de entrega por zonas; por ejemplo, si la tienda es en Bogotá entonces la entrega es de X y fuera de Bogotá es Y.
Una tercera estrategia para asignar ese precio y es empezar a asignarle a cada destino su propio valor de entrega; por ejemplo, si tu sitio web es a nivel Colombia tendrías que colocarle uno a uno precios a los 1.200 municipios del país.

Mercado objetivo

Lo que se sugiere hacer es comprender el mercado objetivo; responda estas preguntas ¿Qué buscan mis clientes objetivo? ¿Cómo perciben el valor cuando miran el precio? Puede que un precio barato aumente o disminuya las ventas, además debería pensar en si sus posibles clientes si comprarían su producto por internet, recuerde tener en cuenta los datos demográficos de sus clientes potenciales para evitar el fracaso.

Efecto anclaje en marketing digital


El tercer consejo que le damos es poner en práctica el “Efecto Anclaje” o “efecto Ancla” donde, por ejemplo; los productos y/o servicios más costosos van al principio y los más económicos al final, así se crea la sensación de éstos últimos son los de “menos calidad” o un precio muy alto y al lado una rebaja. Para poner en práctica eso es necesario que organices muy bien las categorías y subcategorías que componen su sitio web junto con los productos top.
Si necesitas una tienda virtual, aquí te contamos de que se trata nuestro plan para este tipo de proyectos.

Disparado el comercio electrónico por el coronavirus y Colombia lidera

Pago de servicios ha subido 71 %, transferencias un 66 % y recargas un 21 %, según Mercado Libre.

“En tan solo 4 semanas (de marzo a abril) se ha registrado un crecimiento del 387 por ciento de las compras en línea en toda la región”, asegura la firma Mercado Libre, según los hallazgos de un estudio adelantado en toda América Latina sobre los cambios en los hábitos de compra de las personas en tiempos de coronavirus.

De acuerdo con el informe, dicho crecimiento del comercio electrónico se encuentra liderado por Colombia en donde se ha registrado un crecimiento del 9,9 por ciento, seguido por Argentina con un 7,6 por ciento, Brasil con un 6,6 por ciento, Chile con un 5,6 por ciento y México con un 3,7 por ciento.

“Desde febrero a marzo de este año, el tiempo de navegación de los usuarios por región aumentó en un 17 por ciento así como la cantidad de búsqueda por personas que creció en un 39 por ciento durante esta temporada”, indica el estudio.Así las cosas, según Mercado Libre, en Colombia, la cifra de crecimiento de pedidos ha aumentado en un 119 por ciento, siendo el segundo país en donde más ha sobresalido este factor después de Chile con un 125 por ciento.

Le siguen México con un 112 por ciento, Argentina con un 52 por ciento, Brasil con un 39 por ciento y Uruguay con un 31 por ciento.

¿Qué están comprando los colombianos en línea?

En Colombia concretamente, se pudo evidenciar un cambio en las preferencias de los consumidores relacionado probablemente con el aumento de tiempo que han pasado en sus hogares lo cual ha impulsado así mismo a las categorías de estilo de vida.

Entre las categorías con más crecimiento en el país el estudio destacó: audífonos con un crecimiento del 289 por ciento, juegos de mesa, con 230 por ciento, juegos de video, con 228 por ciento, belleza y cuidado personal, que subió 141 por ciento, consolas de juegos, un 92 por ciento y cuidado Facial que subió 91 por ciento.

Dentro de los hallazgos del estudio, se logró identificar que las personas no solo han trasladado sus dinámicas de compra de productos al e-commerce, sino que además han adoptado nuevos hábitos para realizar procesos financieros en línea.

De acuerdo con el estudio, en lo que se lleva de emergencia sanitaria el uso de plataformas electrónicas para el pago de servicios ha aumentado en un 71 por ciento, para realizar transferencias en un 66 por ciento y para realizar recargas en un 21 por ciento.

El estudio reveló además que este es un comportamiento que las personas han apropiado de tal forma, que incluso al terminarse toda la emergencia sanitaria y comenzar a retornar a la “normalidad”, seguirán manteniendo, convirtiéndolo en su preferido.

De acuerdo con las encuestas realizadas en los diferentes mercados, 7 de cada 10 personas declararon que continuarán utilizando métodos de pagos electrónicos.

En Colombia, el porcentaje de personas que seguirán haciendo uso de los canales electrónicos aún después de que pase la coyuntura es del 67 por ciento. En Argentina, es del 76 por ciento, en Brasil del 75 por ciento, México 57 por ciento y Chile 74 por ciento.

Llegó la hora de hacer e-commerce

El encierro por el coronavirus tomó a muchos por sorpresa. Pero este es el momento de montarse en las plataformas digitales. Los expertos señalan que básicamente no hay otra alternativa para los negocios que buscan triunfar.

El estudio Euromonitor 2019 proyectó que el comercio electrónico en 2020 en Colombia iba a ser de US$8.000 millones y que para 2021 aumentaría a US$10.000 millones. Sin embargo, el mismo trabajo dice que apenas 20% de las transacciones de compra se realizan a través de centros comerciales virtuales como Mercado Libre, frente a una cifra de 52% en la región.

Esto confirma que Colombia no estaba muy preparada para hacer comercio por internet en medio de la cuarentena decretada por el Gobierno, que ya lleva más de 45 días. Pero también muestra que se abre una gran oportunidad para las empresas de crecer y subirse a estas plataformas para sobrevivir. Básicamente porque hoy y a futuro no hay otra alternativa.

Un estudio de Google así lo demuestra. A raíz de la pandemia las transacciones relacionadas con e-commerce se incrementaron en más de 50%, aunque no en todas las categorías. “Algunas, como hacer mercado por internet, se cuadriplicaron”, dice Bernardo Vanegas, cofundador de la Cámara Colombiana de Comercio Electrónico. Pero lo más importante es que aumentaron las transacciones entre personas de franjas etáreas que no estaban todavía en el comercio electrónico.

“Individuos entre 55 y 70 años, que ni siquiera pagaban los servicios online porque era plan ir al banco, hoy están confinados por más tiempo que el resto de la población”, agrega.

Esta coyuntura les ha obligado a usar internet para realizar sus vueltas bancarias.

Para Fernando Silvestre, Country Manager de Neoris, adoptar una estrategia de comercio electrónico es una decisión fundamental y no hay una sola solución para todos porque depende del tipo de negocio y servicio que se quiere ofrecer.

No es lo mismo vender un producto que dar cursos online o hacer telemedicina.

Según explica, para dar este salto hay que hacer las preguntas correctas entre las cuales está cómo mantener a los equipos estimulados para no perder el talento.

También es necesario mantener una cadena de abastecimiento, pues “muchas industrias tienen canales para cobrar y el talento, pero fallan en la logística, ya sea porque no reciben materia prima o no tienen capacidad de entregar el producto”, añade.

Además hay que preguntarse cómo seguir manteniendo los flujos de contactos con los clientes. Un caso que sirve de ejemplo es el de los gimnasios, o el de la industria del entretenimiento, que deben reinventarse usando plataformas virtuales, porque no hay forma en el mediano plazo de que sus sedes abran.

Para ambos expertos no solo las grandes empresas tienen que estar pensando en digital, sino también las Pymes e incluso las tiendas de barrio.

Según Vanegas, el primer error que cometen los pequeños empresarios y comerciantes es pensar que la respuesta a las ventas en internet se resuelve solo con tecnología. “Lo que siempre decimos al comerciante es que va a tener un nuevo canal de venta”. Esto implica que debe pensar en las cuatro “P” del mercadeo: producto, precio, promoción y punto de venta. Debe ser una estrategia porque tendrá que poner a conversar ese canal de ventas con sus otros canales. Por eso, el comercio electrónico, según él, reposa en el siguiente trípode.

El catálogo de productos: es la primera pata. Debe tener fotos bonitas, el precio, ficha técnica, registros Invima y descripción del producto. En este punto hay que pensar en una plataforma para venderlo. Hay varias alternativas en el mercado, pero lo importante es que ponga en esa página los productos en existencia, “pues si pone los agotados castiga a la tienda”. Vanegas recomienda una solución conocida como Storeon, desarrollada por Tekton que facilita las cosas para los pequeños empresarios, pues ya tiene contrato con todos los centros comerciales virtuales (incluido Amazon) y da servicios adicionales como inteligencia sobre el negocio. Esto representa una ventaja a la hora de lograr que los clientes lleguen a su tienda virtual.

Medio de pago: Hace diez años había dos o tres opciones, pero hoy se puede escoger entre 67 medios de pago, lo que brinda muchas oportunidades para los empresarios. La elección depende de cuántas transacciones va a generar, si va a querer consignar directo en su cuenta o cuánto serán las ventas promedio.

El operador logístico: es la entrega, el punto en el que el negocio se la juega toda porque es el momento de la verdad. “Es cuando se materializa la promesa de valor”, dice Vanegas, y agrega que la gente es tolerante en cuanto a los tiempos, pero castiga a la empresa cuando le dicen que el producto estará en casa en una fecha y llega varios días después. “Ellos agradecen que se les diga en qué estado está su pedido, la hora exacta, pues así los ven como una compañía seria”. Agrega que los proveedores logísticos en el país tienen esos servicios.

Los expertos Silvestre y Vanegas creen que los nuevos hábitos de consumo permanecerán después de la pandemia, y que el actual modelo de aislamiento social en adelante podría ser parte de la vida cotidiana. Por eso el mensaje es dar el salto ahora.

Este es el momento de aplicar el viejo adagio de los abuelos: “en épocas de crisis unos lloran mientras otros hacen pañuelos”.

Nuevos tiempos

La telemedicina abarca atención, orientación o consulta en forma remota. Ha tenido un desarrollo lento porque a la gente le da tranquilidad verse con su especialista cara a cara. Pero hoy, debido al coronavirus, las restricciones son mayores y eso ha llevado a una gran adopción de telemedicina en el país. Según Fernando Silvestre, de Noaris, ellos identifican cuáles pueden ser los aceleradores digitales para cambiar el hábito de hacerlo presencial. Un proyecto de estos antes duraría entre seis meses y un año, pero ahora se hace en 15 días.

Cómo reactivar ventas de su negocio a través de comercio electrónico

Conozca las oportunidades y las alternativas de pago que puede ofrecerles a sus clientes.

La carrera hacia la digitalización de diversos sectores económicos y de la sociedad en general se ha cimentado desde hace varios años. Sin embargo, el efecto derivado del confinamiento aceleró el proceso.

Por ello numerosas empresas descubrieron la utilidad de algunas herramientas tecnológicas para hacer su trabajo más eficiente y productivo.

Otras han decido ir más allá y han incorporado lo digital en su modelo de negocio. Por ejemplo, han optado por el comercio electrónico, el cual consiste en la realización de transacciones de productos y servicios por redes sociales, aplicaciones móviles y/ o sitios web.

De esta manera, han buscado aprovechar las oportunidades comerciales derivadas del mayor uso del internet para realizar compras.

Así lo evidencia un estudio de la Cámara Colombiana de Comercio Electrónico, el cual indicó que en el país hubo más de 136 millones de transacciones digitales en el 2018, dos años atrás este dato equivalía a 70 millones.

¿Cuáles son esas soluciones?

Un aspecto clave de los empresarios a la hora de hacer negocios se basa en cómo concretar las ventas a sus clientes. Allí, entidades financieras y fintech ofrecen soluciones de pago en línea que puede adoptar dependiendo de las necesidades de su negocio, entre las que se encuentra:

  • Proveedores de soluciones de pago: habilitan la compra a través de la web. En ocasiones están conectadas a las plataformas de diversos bancos, por lo que el proceso de compra final se realiza en la plataforma de la entidad financiera donde el cliente tiene su cuenta
  • Pasarelas de e-commerce: equivalen a servicios financieros que pueden incluirse en el sitio web de la empresa, facilitando un punto seguro para que los clientes en un carro de mercado seleccionen los productos y servicios que desea para luego comprarlos en una interfaz segura y de una manera rápida.
  • Transferencias electrónicas: corresponde a envíos de dinero desde la cuenta bancaria o billetera electrónica del cliente a la del negocio. Esta puede darse a través de cuentas de una misma entidad financiera u a otra entidad bancaria.

Sin lugar a dudas el comercio electrónico y la digitalización de la economía y de las empresas representan múltiples oportunidades para los negocios.

Este proceso de digitalización debe ir acompañado de un mayor desarrollo del ecosistema de pagos electrónicos, para lo que es necesario seguir reduciendo la brecha digital, aumentar la inversión en infraestructura tecnológica y contar con una población cada vez más incluida financieramente.